Reseña

El Derecho Constitucional ecuatoriano constituye la base jurídica que organiza y regula el funcionamiento del Estado, además de establecer las garantías fundamentales para los ciudadanos. Este marco normativo encuentra su principal sustento en la Constitución de la República del Ecuador de 2008, un texto que ha sido ampliamente reconocido como uno de los más avanzados en el ámbito global debido a su carácter inclusivo, innovador y progresista. La Constitución no solo consagra los principios tradicionales del constitucionalismo, como la soberanía, la división de poderes y el respeto a los derechos fundamentales, sino que también incorpora elementos únicos como los derechos de la naturaleza, el Buen Vivir o Sumak Kawsay, y el reconocimiento del Ecuador como un Estado plurinacional e intercultural.