Reseña

En este poemario, Diego Maenza convoca a los elementos, a la historia y al colapso. Cada poema es una era, un tiempo poético con su propio pulso, su lenguaje y su herida. Desde la furia de la materia hasta el desmoronamiento de la conciencia, los versos se despliegan como placas tectónicas, chocando y dejando grietas.
Con una voz profética y a la vez íntima, el autor traza una crónica de la humanidad escrita desde su último crepúsculo: un inventario de ruinas, bestias, lenguajes y culpas. El universo aquí no se expande: se repliega. Las galaxias se abrazan, los planetas orbitan hacia adentro, y el verbo se va apagando sílaba por sílaba hasta convertirse en silencio.
Este no es un libro para redimir. Es un canto final, una advertencia lírica, un espejo donde la especie humana se ve por última vez… antes del punto final.