El dinero electrónico como nuevo sistema de pagos
El dinero electrónico es un recurso monetario que consiste en grupos de circuitos que se unen para dar un resultado según el uso que se le asigne. Es una herramienta que funciona como almacenamiento de dinero en un dispositivo electrónico para el uso del consumidor en general según los cupos que sean otorgados.
Una cuenta de dinero electrónico se apertura introduciendo información básica del usuario en el sistema desde un dispositivo móvil (nombres, apellidos y número de cédula de ciudadanía). Una vez activada la cuenta y depositada la suma de dinero físico correspondiente al cupo escogido, el usuario podrá utilizar estos fondos en los establecimientos habilitados por el Banco Central del Ecuador.
Como principio, este avance de la tecnología ha sido creado para facilitar con seguridad las transacciones financieras al segmento de la población que ya forma parte del sistema financiero; y, simplificar la bancarización del segmento de la población, que por diferentes factores aún no puede ser incorporada al sistema financiero.
El dinero Electrónico en el Ecuador es administrado por el Banco Central, entidad que realizó su lanzamiento oficial en el mes de diciembre del año 2014. El dinero electrónico es un medio de pago moderno que busca generar inclusión social y financiera en nuestro país al ser un medio de pago totalmente tecnológico que busca la bancarización de la ciudadanía menos favorecida, a quienes se les dificulta acceder normalmente a estos servicios. A lo largo de los casi dos años de operación en el mercado ecuatoriano, no ha sido promocionado adecuadamente, siendo objeto de una serie de ajustes en su nombre comercial, sistema y plataforma tecnológica, para finalmente ser identificado -comercialmente- como “efectivo desde mi celular”.
La presente investigación permitirá a sus lectores conocer minuciosamente la estructura, características, funcionamiento y ventajas del dinero electrónico.
A través de los diferentes aspectos analizados se busca crear una base sólida de conocimiento que genere confianza en el empleo del dinero electrónico, específicamente, entre la administración y clientes de empresas con el objetivo de adoptar este nuevo medio de pago para reducir los índices de morosidad existentes en un segmento de clientes.