Reseña

El carácter dinámico que tienen las sociedades actuales, signadas por lo que el sociólogo ZygmuntBauman denominó modernidad líquida, donde las instituciones y estructuras sociales están en permanente movimiento sin el anclaje a la estabilidad, la certidumbre y la tradición que antes del fenómeno de los computadores, la web, el internet y las redes sociales fueron los signos más peculiares de la sociedad. Por mediación de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) se ha modificado no solo la generación y difusión de conocimiento, sino también la valoración política, social y económica del mismo.
El conocimiento social, científico, cultural, tecnológico tiene fecha de caducidad debido al avasallante desarrollo tecnológico. La formación, capacitación, habilidades y destrezas adquiridas en la universidadno son suficientes para el mundo laboral. En él,cada día se exige un sinnúmero de cambiantes competencias para cumplir diferentes funciones y para enfrentarse a nuevos desafíos profesionales. En las sociedades actuales, una carrera universitaria ya no es suficiente para obtenerestabilidad ocupacional, es necesario recurrir a la educación permanente con el objeto de actualizar, renovar y mejorar la formación y el desempeño laboral profesional.
En este marco de ideas, la modernidad líquida le exige a la universidad una reconfiguración de su estructura académica-investigativa y de interacción con el entorno social. La universidad,debe renovar el perfil de la docencia en aras de una relación con el conocimiento diferente a la tradicional, superar el papel del docente como dador de conocimientos académicos hacia el de productor de conocimientos. Esto significa redimensionar el poder de la docencia, la cual ya no radicaría en la transmisión de un dominio o parcela del conocimiento, sino en ese dominio y, además, el de la capacidad de generar nuevos conocimientos bajo nuevas combinaciones de formatos, medios y canales. Cambio que obliga también a redimensionar la investigación universitaria en virtud de aprovechar la abundancia de posibilidades y medios que ahora tienen a su disposición los investigadores y la universidad para la encomienda de realizar investigación y crear mecanismos de interacción directa con la sociedad que le permita asumir una posición estratégica en relación al uso del conocimiento que la universidad produce y la que la sociedad demanda.
En un número significativo de documentos suscritos por organismos internacionales de educación se le da el encargo a la educación universitaria de coadyuvar al desarrollo sostenible de los países, encomienda que aumenta sustancialmente el ámbito de influencia que esta tiene en la sociedad y la enfrenta a nuevos desafíos en la formación de personas con un perfil competente para desenvolverse exitosamente en un mundo laboral cambiante, exigente, dominado por el imperio de las TIC, pero al mismo tiempo circunscribiendo sus acciones dentro de un marco de consideración, respeto y responsabilidad hacia la naturaleza.
Como ya se ha indicado, los cambios sociales, económicos, políticos, tecnológicos y culturales actuales también han interpelado a la investigación universitaria para que tome un nuevo rumbo y sentido, la misma ya no es vista como una función complementaria de la docencia y predestinada a un sector reducido de docentes investigadores y de contener una limitada acción en sus hallazgos para convertirse en una exigencia de las demás estructuras de la sociedad que además manifiestan tener una expectativa y valoración muy alta sobre los resultados, sobre los nuevos cocimientos producidos, por lo tanto la identificación de sus objetivos y el análisis de la proyección de sus resultados son básicos para la reconfiguración de la universidad.
Este libro desarrolla una propuesta para abordar la investigación como un espacio de reconfiguración de la universidad, explicitando en primer lugar el cambio educativo y su importancia para la sostenibilidad y los elementos de la transformación de la universidad para exponer luego la visión actual de la investigación en la universidad al tiempo que se reafirma la postura de la investigación como componente esencial del trabajo docente y de la actualidad del rol de investigación y formación de investigadores en la universidad. Asimismo se avanza en la senda de discutir a profundidad el quehacer investigativo universitario en la sociedad de la información y el conocimiento para derivar en un marco justificativo de la relevancia del trabajo investigativo de los estudiantes universitarios. Finalmente se presenta a modo de provocación los desafíos y oportunidades del proceso de investigación en la universidad.
Imprimimos también en este libro el reconocimiento a todos aquellos docentes universitarios que con su aporte entusiasta y dedicado a la docencia, investigación y extensión hacen posible una mejor sociedad y el deseo de que sirva de motivación a los estudiantes investigadores para valorar la investigación como una oportunidad de hacer conocimiento, como una herramienta poderosa para la actualización y renovación de los saberes y un vehículo de la formación permanente; y además, la esperanza de que la información contenida en este libro sea valiosa para aquellas persona que no pertenecen a un determinado colectivo de investigadores pero tienen espíritu indagador y producen conocimiento, los innovadores.