Reseña

Para el año 2020, el agro ecuatoriano debe ser solidario, productivo y competitivo; deberá garantizar la seguridad alimentaria del país, insertándose en el mercado mundial, produciendo bienes y servicios diferenciados y de calidad, generando valor agregado con rentabilidad económica, equidad social, sostenibilidad ambiental e identidad cultural (SENPLADES, 2007).
La costa ecuatoriana es un territorio con variedad agrícola, la explotación de cultivos como el banano, caco y café son tradicionales; representando una importante fuente de divisas para el país. Los cultivos con considerable volumen de comercialización interna son el arroz, maíz, soya y frutales, abastecen al consumo interno y a la gran industria. Actualmente hay productos que poco a poco van ganando espacio en el mercado interno primordialmente para uso industrial y mercado externo, inducido por políticas de estímulo productivo de productos de exportación no tradicionales como el mango, melón, maracuyá, piña y otros (INIAP, 2006).
La planta del maíz se la puede utilizar en sus múltiples etapas de desarrollo como las mazorcas jóvenes hasta las mazorcas tiernas y los granos maduros. Con el crecimiento de la población mundial, que actualmente está cerca de 6000 millones de habitantes y que alcanzara los 8000 millones en el año 2030, este incremento de 2000 millones nos proyecta que el maíz continuará teniendo un papel muy importante en la alimentación de esta población en aumento (F.A.O, 2009).
En nuestro país la creciente demanda de éste cereal ya sea para el consumo directo en la alimentación humana, o para suministrar alimento a otros sectores de la producción, para la industria en general o para su exportación, hace evidente la necesidad de manejar a éste cultivo en forma adecuada para lograr una mayor producción y una eficiente comercialización.
En la provincia de Los Ríos existen alrededor de 80914 ha de maíz, con una productividad que, en términos de rendimientos, fluctúa entre 1.5 t ha (a nivel de los pequeños agricultores con tecnología tradicional) y 3.7 Tm/ha (a nivel tecnificado), en las mejores condiciones edafoclimáticas de la provincia.
Las condiciones adecuadas, suelos propicios y un gran mercado de consumo han hecho que este cultivo se convierta en una de los rubros más importantes, para el pequeño productor de la provincia. De allí que, es importante realizar un análisis económico de todos los factores que intervienen en el cultivo, para calcular su rentabilidad en cada uno de ellos se manifiesta los efectos sobre los costos del manejo del sistema de cultivo y de los ingresos por los rendimientos de los mismos, que inciden en la rentabilidad del cultivo.