Salud Pública del Ecuador
El marco de referencia obligado en la actualidad para hablar de salud, lo constituye el marco de definiciones y acuerdos que ha constituido la Organización Mundial de la Salud y sus países signatarios. En tal sentido, este organismo (OMS), fija sus objetivos en una salud definida como un “estado completo de bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de afecciones o enfermedades” (1).
Por su parte, la salud pública como disciplina, tiene sus antecedentes en los múltiples cambios sociales que se dieron en el seno de la Revolución Industrial y la Modernidad como modelo civilizatorio. La proliferación de las grandes ciudades, el hacinamiento producido por las grandes migraciones a los centros urbanos e industrializados, el enfrentar nuevos trabajos en condiciones inadecuadas e inseguras, adecuarse a nuevas dinámicas de vida de manera acelerada y poco planificada, trajo como consecuencia la aparición o reproducción acelerada de enfermedades y situaciones de insalubridad.
Estas condiciones de vida, que se manifestaban con dinámicas feroces en las ciudades europeas más importantes, y que marchaban a la par de un sistema cada vez más industrializado y de un estilo de vida cada vez más urbano, coexistían con un creciente impulso de las ciencias y la tecnologías, y la revolución tecnológica también marcó un hito en materia de salud, ya que proporcionó herramientas que proporcionaron importantes avances.