Reseña

El escritor Marcelo Mendoza, buscando sentido a su existencia hedonista, se embarcará en una empresa que pondrá en riesgo su vida.
Un plan político esperanzador para un pueblo agobiado de promesas, un Presidente que lo puede encausar si tan solo consigue los votos necesarios.
Jacinto Gutiérrez, Presidente del Ministerio de la Paz y la Justicia de la República Bananera, buscará establecer el cartel de narcotráfico más poderoso del país, para esto será necesario infiltrarse en todas las esferas políticas y sociales.
El Grupo de las Fuerzas Guerrilleras Unidas (FGU), que opera en la frontera, buscará convertirse en un movimiento político reconocido internacionalmente, por intermedio de su segundo al mando, Édgar Reyes, quien gestionará la liberación de sus compañeros extraditados mediante el canje de rehenes en el País Cafetero.
En medio de esta vorágine de acontecimientos aparecerá el amor, bajo la forma de una sensual prepago, Francesca Lima, quien le mostrará a Marcelo que se puede matar y morir por amor.
El escriba de Angostura se recrea en una época convulsionada de la política nacional, en la cual la lucha por alcanzar el poder llevará a movimientos políticos a acuerdos con grupos que tarde o temprano exigirán su cumplimiento.
Una novela de narco ficción que nos devolverá la memoria, pero también la resiliencia para soñar en días mejores.