Letargo
Letargo es el nombre de este cuerpo poético. Me gusta la brevedad y el acierto al nombrar un libro. Posibilita que el lector juegue con la palabra y dispare su imaginación hacia blanco desconocido. Borges planteaba que se puede escribir dentro del mundo de los sueños. Jiménez no es tan ambiciosa; opta por jugar en el estado de pre-ensoñación. De ahí en adelante, su poética y ella misma actúan como una diosa que crea su propio mundo; quiero decir: para Johanna Jiménez, su voz poética es el principio y el final, y el poema es el que es. Punto. Las significaciones, interpretaciones, intenciones y demás consideraciones son netamente trabajo del lector.