Los horrores de la Siberia
Un poco antes de los sucesos de este relato, antes del asesinato del zar Alejandro II por grupos nihilistas, en 1849, Fiódor Dostoyevski fue condenado a trabajos forzados en la lejana Siberia, quién sino él puede describir aquellas deplorables condiciones humanas de aquel lugar abandonado por Dios: frío sin límites, insoportables pestilencias, maltrato, abusos, pulgas, piojos…
Con este preámbulo, querido lector, introdúcete en la lectura cruda —y a la vez esperanzadora y amena— de Los horrores de la Siberia, de este genio del relato de aventuras que es Emilio Salgari.