Plan de negocios para PYMEs
Desde la época del desarrollo del capitalismo a nivel mundial, el diseño de proyectos ha tomado un auge importante. A medida que ha pasado el tiempo, estas teorías se han ido adaptando a todas las condiciones de la vida en general, tanto en aspectos de desarrollo social como de desarrollo económico. Esto ha determinado la existencia de diversas metodologías que permiten el diseño, desarrollo y evaluación de los diferentes tipos de proyectos.
En el caso de Ecuador, las micro empresas son una parte fundamental del esquema de creación de valor en el país. Diariamente surgen nuevos emprendimientos, y muchas empresas se han ido adaptando a las nuevas tendencias de consumo y se han ido modificando permanentemente.
Para llevar a cabo un proyecto empresarial exitoso, es fundamental contextualizar y justificar técnicamente las variables de estudio. Estas variables servirán de guía para elaborar el trabajo en todo su contexto. A partir de estos antecedentes, se puede buscar sustento bibliográfico, técnico y científico para el desarrollo de la propuesta.
Es necesario llevar a cabo un estudio analítico que permita aplicar las diferentes fases de un proyecto empresarial. En primer lugar, se debe realizar un análisis situacional o análisis del entorno, que determina los aspectos más importantes del entorno frente a la empresa, entre los cuales se incluyen el entorno externo, el entorno local y el entorno interno.
Posteriormente, se debe llevar a cabo una investigación de campo para determinar los patrones de consumo y aceptación de calidad, precio en el sector geográfico de influencia. Con ellos se podría establecer la demanda actual y proyectada, así como el análisis de las características del producto que manifestaren los encuestados.
Es importante tener en cuenta el área comercial y de marketing de las PYMEs para aumentar su nivel productivo y comercial. La investigación profunda del Mix del Marketing aplicado es una estrategia muy efectiva para lograrlo.
La investigación de mercado y sus componentes buscan obtener información de fuentes primarias para cotejarlas con las fuentes secundarias y así obtener un criterio con menor grado de incertidumbre acerca del comportamiento del consumidor, la demanda del producto o servicio, las tendencias del mercado, las características que espera el cliente y los aspectos esenciales del servicio que el cliente espera como un valor agregado a su compra, entre otros aspectos que se pueden desarrollar en el estudio.
A partir de estos antecedentes, se puede realizar el estudio técnico en el cual se toman en cuenta todas las características y recursos necesarios para llevar a cabo las actividades empresariales en el aspecto de operaciones. Como parte de un estudio de factibilidad, se realiza el estudio financiero donde se establecen los ingresos, los costos, los gastos, las inversiones, las depreciaciones, lo que orienta a obtener los estados financieros, tales como el estado de situación inicial, el estado de resultados y el flujo de caja. Posteriormente, se realiza la evaluación financiera que puede determinar con sus resultados la factibilidad o viabilidad del proyecto en cuestión. En esta fase, se establecen los ingresos esperados, los costos y gastos estimados, las inversiones necesarias y las depreciaciones proyectadas. Con esta información se elaboran los estados financieros, tales como el estado de situación inicial, el estado de resultados y el flujo de caja proyectado.
A partir de estos estados financieros, se pueden realizar diversos análisis financieros para determinar la factibilidad y rentabilidad del proyecto. Algunos de estos análisis incluyen la tasa interna de retorno (TIR), el valor presente neto (VPN) y el periodo de recuperación de la inversión (PRI). Estos análisis permiten tomar decisiones informadas acerca de la inversión en el proyecto y si es viable o no.
Es importante destacar que la evaluación financiera no es la única consideración en la toma de decisiones acerca de un proyecto. Otros factores a tener en cuenta incluyen el entorno económico y social, la competencia, las tendencias del mercado, la demanda del producto o servicio y la capacidad del equipo de gestión para llevar a cabo el proyecto.
En resumen, la evaluación financiera es una fase fundamental en el diseño de proyectos, que permite determinar la viabilidad y factibilidad del proyecto en cuestión. Sin embargo, es importante considerar otros factores relevantes en la toma de decisiones acerca del proyecto. Un enfoque analítico y estratégico en el diseño de proyectos es clave para el éxito empresarial y económico a largo plazo.