Reseña

Jorge Massuco Corti nos entrega con este libro un generoso conjunto de fotografías suyas, tomadas durante la quincena de años indicadas en el título del mismo. Ellas operan a doble nivel: como archivos de un fecundo momento de las artes escénicas locales y, a la vez, como cuidadosas piezas artísticas. Además, el autor nos ofrece una serie de anotaciones sobre el acto de observar y sobre el compromiso de ser testigo de su tiempo y contexto. El magma sobre el que se moviliza todo es la belleza de la ficción por fuera del fingimiento: “Porque algo hay que crear para creer. O creer para crear”, insiste en a lo largo de las páginas. Finalmente, sus fotos permiten retornar a ciertos espacios arquitecturales de Guayaquil que son parte de una desaparecida cartografía de las artes, pero que le recuerdan a esta ciudad que tuvo una configuración que permitió trazos y modos de habitar vibrátiles, lo que nos resulta fundamental para repensar nuestro quehacer ciudadano hoy.