Tradición oral de las fiestas indígenas en San Pablo del Lago
Tradicionalmente la fiesta indígena ha sido objeto de estudios de veta antropológica y sociológica, enfocados, unos, en el folclor y sus diversas manifestaciones, otros, en las formas de producción y reproducción campesina. En los Andes, el calendario agrícola y sus festivales de siembra y cosecha han sido temática frecuente de los estudios campesinos. Una corriente temprana de los estudios antropológicos en torno a la fiesta se centró en el análisis de la religiosidad tal como se expresa en las prácticas festivas indígenas1. También ha existido interés desde la etnohistoria en los complejos festivos andinos en su relación con los cambios operados en la organización social durante la época colonial. Escasean, al mismo tiempo, estudios sobre el simbolismo y el ritual de las fiestas indígenas en los Andes ecuatorianos, y son más esporádicos aún aquellos estudios que conjugan estas facetas con la esfera de lo político.
El presente estudio aborda la fiesta indígena desde una perspectiva distinta y a la vez complementaria de las anteriores. En primer lugar, esta obra se propone como un ejercicio historiográfico alternativo para (re)escribir la historia reciente de algunas comunidades de la cuenca del Lago San Pablo en la provincia de Imbabura. El carácter alternativo de la obra le viene dado por el privilegio que otorga a la memoria colectiva de las comunidades como fuente inagotable para construir una matriz polifónica de sentido. En esta medida, asume el discurso producido por la tradición oral no como otra fuente histórica más, sino como una construcción particular de tipo testimonial que se teje, primero, en la experiencia vital de los narradores y sus grupos de pertenencia, y segundo, en la matriz de relaciones de poder que determinan dicha experiencia individual y colectiva desde la dominación, pero al mismo tiempo desde la contrahegemonía.