Modelo Educativo del ITSUP
“La educación no es preparación para la vida; la educación es la vida en sí misma”. John Dewey
La educación superior a nivel internacional se torna cada vez más interesante, quizás por su alto nivel de incertidumbre o por la complejidad que encierra. Sea cualquiera de las dos visiones, es una oportunidad de aprovechamiento absoluto de nuevos saberes teóricos y prácticos. Mueve el pensamiento y hace que haya enfrentamientos con desafíos y problemáticas enfocados al futuro; en virtud del bien común. Hoy en contextos de globalización, la autonomía, la libertad de cátedra, la investigación, el trabajo docente – estudiantil y la evaluación formativa permanente están amenazados, de aquí nace la necesidad de una transformación social en contextos educativos universitarios.
La globalización es entendida como un proceso irreversible, considerada como un fenómeno socio – político; pero hay esperanza en la educación superior en la construcción social de ideales superiores en cuento al desarrollo integral de los seres humanos que tiene a su cargo. Para este logro significativo se precisa de la actualización consciente y permanente de los docentes, de los contenidos curriculares y culturales, la inserción de las instituciones en las redes de investigación, contextualización de las investigaciones e innovaciones, modernización de la gestión académica y la complementación de la educación presencial, semi-presencial y a distancia.
En Ecuador, la educación universitaria se centra en la formación integral del ser humano (Art. 2, Ley Orgánica de Educación Superior - LOES), de aquí la necesidad de contribuir a la búsqueda de soluciones a los problemas nacionales. Por eso, se convierte en un imperativo el desarrollo de la competitividad. Competitividad no vista como rivalidad, sino como un proceso permanente de desarrollo humano en función de: conocimientos actualizados, habilidades, hábitos, valores, motivaciones, valoraciones personales y autovaloraciones; que condiciones un desempeño profesional exitoso.
Hoy la educación universitaria debe apostar a la docencia, a la investigación, a la vinculación con la sociedad; por ende a la innovación y a la competitividad en función de la solidaridad, la igualdad, la equidad y la justicia social. El desafío es inminente y permanente, se caracteriza por la objetividad, la eticidad y la formación de hombres y mujeres plenos en instrucción y en educación.
Desde el Instituto Superior Tecnológico “Portoviejo” (ITSUP), como institución de educación superior, repiensa y asume la educación como un
proceso de enriquecimiento donde los logros y resultados son notorios. Se relacionan estrechamente con un discurso pedagógico, educativo, histórico y negado a la demora en la contribución al desarrollo del país, de la provincia y del cantón.
El Modelo Educativo del ITSUP, propende al aprendizaje y a la innovación; donde se trabaja paralelamente en una educación emprendedora y en la ética solidaria que propende a conocimientos actualizados y sólidos. Se forma un profesional insertado en las transformaciones del siglo XXI, competente y comprometido con la sociedad que le ha formado. Además considera la gestión del conocimiento en conjunto con el currículo de sus especialidades, en función de la calidad de la educación que protagoniza. Una de las distinciones como instituto es la orientación de la mirada “hacia adentro”, en la búsqueda constante de la calidad, en la difusión de los resultados y en la transformación permanente.
Los enfoques del modelo son: de derechos, interseccional e intercultural; con visión de inclusión, de género, pueblos, nacionalidades e interculturalidad, atención a la discapacidad, al ambiente y al acceso universal; en función de la formación integral de los estudiantes. El modelo ofrece concepciones teórico
– metodológicas que orientan y guían la gestión académica por funciones sustantivas, para el logro de la excelencia académica en cada una de las especialidades. El estudiante es un sujeto activo, responsable y consciente del proceso que protagoniza.