Reseña

Los electores actuales han cambiado, no sólo en sus características sino en la forma
de planear su decisión. En la mayoría de los países de Latinoamérica votan libremente,
y saben que a través de su voto tienen el poder para apoyar, castigar o dar un voto
“útil” a los candidatos que, aunque no les agraden ni convencen del todo, bien pueden
derrotar a los funcionarios que en su opinión no han sabido gobernar.
Las diferentes herramientas de transmisión de información también han cambiado. En
la actualidad, los candidatos y las campañas disponen de nuevas tecnologías y
numerosas herramientas comunicacionales; por esta razón las campañas políticas
deben ser mucho más estratégicas, creativas, sencillas y directas.
En la sociedad moderna, los ciudadanos votan por aquellos candidatos que más les
agradan y, sobre todo, por aquellos con los que se identifican en mayor medida. La
forma en que los electores perciben a los candidatos influye directamente en la manera
en que se estructuran e implementan las campañas de comunicación política. Además,
conforme los ciudadanos reciben mayor información se hacen más selectivos, por lo
que los estrategas se han visto en la necesidad de valerse de distintas técnicas
generadas por la publicidad, con el fin de que las campañas puedan impactar
efectivamente a distintos tipos de público por medio de la introducción calculada de un
cierto grado de ambigüedad en los mensajes y comunicaciones.