Autobiografía humorística y otros relatos
En esta compilación de historias «anecdóticas», Mark Twain, a su puro estilo cómico, irónico y satírico, se inventa una genealogía y se enorgullece de pertenecer a una estirpe de pícaros que no han hecho más que «ayudar» y «mejorar» al mundo.
Y es que Samuel Langhorne Clemens, quien usa el pseudónimo de Twain, se consagra únicamente a sonreír y a incitar a la sonrisa, bajo su firme creencia de que la forma más elevada de humor es aprender a burlarse de uno mismo. Es por esto que estos relatos le roban una carcajada a cualquiera, pues muy pocos autores se cuestionan ingeniosamente las incoherencias de la vida.