San Juan Bosco y María Auxiliadora
y varios de los famosos sueños del santo
La Virgen María siempre estuvo presente en la vida de San Juan Bosco, gracias a que su madre, Mamá Margarita, le inculcó amor y devoción por la Virgen en las oraciones y en la vida diaria. Desde el principio, la Madre de Dios, acompañó su obra en favor de los niños y jóvenes.
La relación entre Don Bosco y María Auxiliadora se basa en la confianza incondicional. En cada acción que el santo realizó, por más pequeña que fuera, se encomendó a la protección de la Virgen María, y de su mano pudo experimentar varios milagros y favores.
A lo largo de su vida, los sueños son una parte esencial en su método pedagógico, a través de ellos se muestra el motor de su acción pastoral: la salvación de los jóvenes. Sus sueños son, hoy, un elemento esencial para conocer la espiritualidad salesiana.