Reseña

Cuando leo al Dr. Nicolás Barrera, definitivamente, mi pensamiento se vuelve a los versos de san Juan de la Cruz: Pastores, los que fuerdes / allá por las majadas al otero, / si por ventura vierdes / aquel que yo más quiero, / decilde que adolezco, peno y muero. Justo en ese poema donde se titula Canciones entre el alma y el esposo es precisamente donde hace hincapié el prolijo autor que no teme a ningún estigma ni prejuicio en esta sociedad abierta ante todas las posibilidades de fragilidad. En esta sociedad el autor se pregunta “si han visto aquel amor” que precisamente hemos perdido. Con un lenguaje severo, como los grandes padres de la iglesia, ajusticia este sistema y lo vuelca a la misericordia. Enfatiza sobre la esperanza y cierra las posibilidades del cuestionamiento. El título me hace recordar una frase de Jung cuando hace alusión a la conciencia cuando dice que sin ella todas las cosas irán peor. Precisamente – me atrevo a decir – que el propósito del autor es que de ahora en adelante todas las cosas puedan marchar a tiempo y encaminadas a la construcción de una sociedad mejor.

Luis Franco González